El éxito profesional de tus hijos: Cómo prepararlo
El éxito profesional de los hijos es lo que todos los padres quieren que tengan en la vida. En cuanto a qué tipo de éxito, esto puede variar, pero la mayoría de los progenitores, además de querer que sus hijos sean amables, comprometidos y miembros productivos de la sociedad, también desean que les vaya bien en su carrera profesional. Pero, cómo preparar a los hijos para el éxito profesional?
En la próxima década, la mayoría de los sectores se verán transformados por la automatización y la robótica, lo que dará más importancia que nunca a las destrezas que nos distingan de las máquinas. A medida que los robots y los algoritmos se hagan cargo de la gran mayoría de las tareas rutinarias, la creatividad, la adaptabilidad y la inteligencia emocional, entre otras habilidades, serán esenciales para lograr el éxito.
Pero, ¿cómo desarrollar esas destrezas en los hijos? ¿Cómo prepararlos para un futuro próspero?
Plantéales un reto (y también a ti)
Los padres a veces esperan o desean que sus hijos vivan la vida que ellos han vivido, pero el mundo de mañana será significativamente diferente, y los padres necesitan pensar de manera creativa y averiguar qué decisiones audaces deben tomar hoy para que sus hijos tengan el mejor futuro posible.
Si bien la educación formal seguirá siendo el marco intelectual necesario para la mayoría de las carreras profesionales, es igual de importante ir más allá. La capacidad de memorizar y recitar cosas —en lo que se centra gran parte de la educación formal— no será suficiente en un mundo donde los robots y los algoritmos hacen eso mucho mejor que los humanos. Según un informe del Foro Económico Mundial, se estima que se perderán 5 millones de trabajos y, en la mayoría de los sectores, el aprendizaje continuo y la capacidad de pensar de forma creativa serán esenciales.
Es posible desarrollar en los hijos una mentalidad creativa y flexible retándolos a ampliar sus horizontes y a aprender cosas nuevas de manera continua. Si nunca han estudiado en el extranjero, debería considerarse la posibilidad de darles esta oportunidad. Si nunca han trabajado o ni hecho un voluntariado en un país totalmente distinto, sería bueno dar un paso adelante y animarlos a hacerlo. Hay que plantear retos a los hijos, siempre respetando su personalidad y sus intereses. Retos que puedan prepararlos para el cambiante futuro que les espera.
Enséñales a adaptarse
Una de las claves para preparar a los hijos para el éxito profesional es animarles a que salgan de su zona de confort.
A nivel práctico, ser más adaptables les permitirá aspirar a una carrera profesional sin limitaciones ni impedimentos. Los mejores equipos y lugares de trabajo serán en el futuro más fluidos, remotos y flexibles de lo que nos podamos imaginar hoy en día y, por ello, se necesitarán trabajadores adaptables y con la mejor preparación posible.
Desde el punto de vista intelectual, la adaptabilidad fomenta la flexibilidad mental y la confianza adecuadas, además de una predisposición a formarse de forma continua en el tiempo y a cambiar de carrera si es necesario. De hecho, Jon Williams, Joint Global Leader, People and Organisation de PwC, anima a los jóvenes a pensar en sí mismos como «un conjunto de destrezas y capacidades, no como profesionales específicos».
Una de las maneras más efectivas de hacer que los hijos desarrollen la adaptabilidad como un conjunto de destrezas es que estudien o trabajen en el extranjero. Vivirán en una nueva ciudad, donde tendrán que hacer nuevos amigos, conocer una nueva cultura y encarar las cosas de manera diferente; todo ello estimulará en ellos un espíritu abierto que les será muy útil.
Ayúdales a relacionarse
Los más exitosos líderes, científicos, empresarios y artistas tienen una cosa en común: su capacidad para relacionarse superando cualquier tipo de barrera. Los problemas globales requieren soluciones globales, y los líderes del mañana deberán ser aún más inteligentes emocional, social y culturalmente.
David Deming, profesor asociado de educación y economía en la Universidad de Harvard, señala otra de las razones por la que las destrezas sociales serán aún más importantes en el futuro: a medida que se automaticen muchos de los trabajos y tareas, la capacidad para combinar los conocimientos técnicos con destrezas sociales avanzadas ayudará a las personas a encontrar oportunidades laborales más gratificantes.
Los viajes son instrumentos maravillosos para fomentar un sentido de conexión y desarrollar habilidades sociales avanzadas, pero estudiar o trabajar en el extranjero es siempre la mejor opción. Los hijos adquirirán así una comprensión más profunda y vivirán una experiencia más completa, algo que no se puede conseguir con un viaje corto. También tendrán la oportunidad de aprender el idioma local, la herramienta más eficaz para tender puentes hacia nuevas culturas y nuevas formas de pensar.