10 formas de ahorrar para un Gap Year
Un consejo que yo daría a cualquier persona es que viaje. Que viaje tanto como pueda. Tan lejos como pueda. Tanto tiempo como pueda. La vida no está hecha para vivirla en un solo lugar y, cuanto más mundo veas, más aprenderás. No solo acerca de otras culturas, sino también sobre ti mismo. Parece un cliché, pero es cierto.
No obstante, no soy la primera persona que da ese consejo. De hecho, mucha gente está a favor de viajar y por eso hay tantos programas y opciones, como hacer un año sabático. Para los que no sepan, un año sabático es un rito de iniciación para cualquier persona, especialmente para las de veintitantos años de edad. Es un tiempo que puedes usar para aclarar tus ideas, descubrir qué es lo que quieres de la vida y conocer todo lo que el mundo puede ofrecerte antes de asentarte en tu carrera y formar una familia.
Un Gap Year puede durar de unas pocas semanas a unos pocos años. Sin embargo, son caros y por ello es importante empezar a planificarlos con antelación y ahorrar de antemano tanto como sea posible. Es más fácil de decir que de hacer, pero te voy a dar algunas sugerencias que espero que te ayuden y sirvan para que des un buen uso a tu pasaporte.
1. Fija objetivos
¿Por qué voy a hacer un Gap Year? Esto es bastante importante, porque vas a invertir mucho tiempo, dinero y energía que no recuperarás. Fija objetivos respecto a qué resultados esperas, cuánto tiempo durará y a qué lugar irás. Esto te ayudará a planificar cómo vas a ahorrar y también a convencer a tus padres.
2. Consigue un empleo
Bueno, supongo que esto es evidente. De esta manera tendrás unos ingresos que te permitirán ahorrar. Si puedes, pide a tu jefe más horas de trabajo, incluso durante los fines de semana. Si esta no es una opción, considera un segundo empleo. A tiempo parcial o por días, también podrías hacer trabajos por cuenta propia como, cuidando niños, paseando a los perros de tus vecinos o incluso vendiendo tu ropa o cosas que ya no uses Cuanto más trabajes, más dinero harás y menos tiempo libre tendrás para gastarlo. Así que, cuando todo el mundo está pasándoselo bien el viernes por la noche y tú estés trabajando, recuerda que ellos no van a pasar una semana en una cabaña de una playa de Tailandia, ni van a ver cara a cara a un gran tiburón blanco desde una jaula en la costa de Ciudad del Cabo.
3. Vive en casa
Esto es bastante duro si ya te has mudado a otro sitio, porque verás reducida tu independencia y ya no podrás vivir bajo tus propias normas. Sin embargo, tendrás tres comidas al día cocinadas por tu madre, comida que, seamos honestos, por lo general está buenísima. Tendrás que limpiar menos (con suerte) y una enfermera gratis en casa cuando enfermes. Así que no está tan mal. Además, incluso aunque tus padres te pidan un dinero de arriendo, te garantizo que es todavía más barato que tener tu propia casa, y no tendrás que preocuparte por arrendarla o dejarla cuando te vayas por fin a hacer tu Gap Year.
4. Conviértete en un recluso social
No me refiero a que vivas debajo de una roca, pero no puedes salir por ahí cada fin de semana. Bebidas, entradas de cine, conciertos, comer fuera; todo suma. En vez de eso, organiza una noche de cine en tu casa. Haz reuniones para cocinar en casa con tus amigos o sal a disfrutar de la naturaleza. Necesitarás aire fresco y, ¿sabes qué? ¡Es gratis!
5. Vende
Si tienes por ahí un montón de cosas que ya no utilizas, ¡véndelas! Recuerda, lo que es basura para una persona, puede ser un tesoro para otra.
6. Anota tus gastos
Comprueba cuánto gastas semanalmente en combustible, comida, alquiler y ocio. Después, mira a ver cómo puedes reducir los gastos o córtalos todos. Adiós a los cigarrillos, hola al buceo de superficie en Costa Rica.
7. Comparte el auto
O vete en bicicleta, a pie o en transporte público al trabajo y a cualquier otro lugar que puedas. Es bueno para tu cartera, tu salud y el medioambiente.
8. Abre una cuenta de ahorro
Abre una cuenta de ahorro en la que puedas ingresar dinero semanalmente y no toques ese dinero. Si la tentación es muy grande, haz que la abran tus padres, de esta manera tendrás la seguridad de que no lo vas a tocar.
9. Come menos carne
Me duele escribir esto, pero la carne es muy cara. Si te haces vegetariano o solo comes carne una vez a la semana, ahorrarás bastante. Lo siento, tocino.
10. Pide dinero para tu cumpleaños
¡Es sencillo! Pide dinero en ocasiones especiales, festivos y tu cumpleaños. Sé sincero con todos cuando les digas por qué quieres el dinero y puede que sean un poco más generosos. Viajar nunca ha hecho daño a nadie.
Al final del día, recuerda que la moderación es la clave. Si te centras y controlas tus finanzas, estarás listo para embarcarte en ese viaje inolvidable de recuerdos imborrables y nuevas amistades, y todo ello mientras te encuentras a ti mismo.